domingo, 29 de enero de 2012

Soñándote despierto.


Hola Lindura:

Hoy he estado hablando con Dios, con su Madre, con algunos santos y con uno de sus ministros, lo suelo hacer a diario pero esta mañana ha sido distinto, yo he entrado en su casa, una bonita iglesia con imágenes y velas, una misa en la que los niños cantaban y un sermón del párroco que me ha llegado muy dentro, realmente hoy me siento más cerca de nuestro Creador.






En esta ciudad las gentes son ambles, cuando hemos acabado hoy en el trabajo, me querían llevar a una de esas tabernas irlandesas que abundan por aquí, yo he declinado la petición, primero porque quería prepararte tu mantita y segundo que yo conociendo a estos muchachos, bueno, querrían que me bebiera una cantidad de pintas increíble y ahora estaría entonando alguna canción vieja que no tengo ni idea lo que significa...

Finalmente no he podido navegar, iba a hacerlo mañana, pero no creo que pueda, tengo algo en marcha y quiero que despegue en las próximas horas, tampoco he tenido tiempo de recordar mis sueños, es que duermo menos que un padre primerizo, pero no me importa, a cada momento estoy soñándote despierto...

Desde un lugar bien remoto, no muy lejano a ninguna parte,
se despide con un sentido beso, por tu amor siempre nacido,
este hombre que no puede ni quiere, dejar nunca de amarte.
P..T..



Me duermo con tu imagen en mente queriéndola conservar,
al cerrar los ojos porque así a mis sueños te yo puedo llevar,
a ese ignoto sitio onírico que a veces no podemos entender,
pero que abrazo feliz pues muy a menudo te puedo allí ver.

En el somos muy dichosos pues nada nos puede aún turbar,
las grandes distancias nada en absoluto vienen a significar,
pues con solo desearlo yo te puedo muy despacio a ti tener,
entre mis brazos para poder luego besarte con gran placer.

Pero así a menudo siento un desasosegante desconcierto,
me percato de pronto que no estás como creía a mi lado,
y ansiando que tu regreses vuelvo a cerrar mi ojo abierto.

Más no retornas a mi lado dejando mi lecho tan desierto,
que para seguir amándote de este modo muy apasionado,
no me queda otro remedio que seguir soñándote despierto.

P..T..





No hay comentarios:

Publicar un comentario