Hola Lindura:
La muerte de Julio San
Francisco me ha hecho pensar mucho, porque yo no estoy disfrutando
del camino que conduce a mi meta, llevo así mucho tiempo, quizás
esa sea la razón que me hace preguntarme si estoy haciendo lo que
debo, si tu no hubieras aparecido en mi vida seguro que estaría
centrado en mi nuevo encargo y seguiría sin gozar de lo que muchos
denominan placeres mundanos.
Pero nada hay seguro en
esta vida sino que el sol sale todos los días y que los impuestos
deben ser abonados, así que me he puesto a repasar el primer libro
de mi trilogía, para que esté listo para publicarse, solo por si
acaso, los dos libros de poemas ya están ultimados, pero el resto
necesita un repaso y me gustaría, aunque Dios se me llevara, que
fueran publicados, no espero morirme, pero nunca se sabe, yo siempre
tengo hecha la maleta y para ese postrer viaje procuro estar siempre
presto y dispuesto, incluso en este desierto desde el que contemplo
veintinueve palmeras.
Desde un lugar bien
remoto, no muy lejano a ninguna parte,
se despide con un sentido
beso, por tu amor siempre nacido,
este hombre que no puede
ni quiere, dejar nunca de amarte.
P..T..
Hoy solo desearía a ti
estar bien pegado,
como un sello en ese
sobre bien lacrado,
tan bien acompasados como
el diapasón,
y que fuera solo una
nuestra respiración,
Y tu parpadeo fuera por
el mio acariciado,
con las pestañas unidas
como un trenzado,
como se funde nuestra
cálida transpiración,
para juntarse en una río
de lujuriosa pasión.
Y si en esto llega un
jinete presto cabalgando,
sin que nuestro placer
pueda aún interrumpir,
aunque a nuestra puerta
acabe torpe llamando.
Y sea una dama con
guadaña reclamando,
mi alma que debe sin la
tuya ahora partir,
suma dicha ir si mientras
te estoy amando.
P..T..
la muerte del amigo estremecio tu alma y la pones al descubierto P..T.., llora que llorar por los que queremos cuando los vemos partir nos hace mucho bien , comparto tu dolor, la muerte no es buena, P..T.., es muy triste, un abrazo.
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